Роль человека в танце танго
Есть о чем поговорить, за чем понаблюдать и, прежде всего, что сделать, чтобы освоить очень сложную роль мужчины в этом танце, тем более что она так мало изучена.
Paradójicamente, sólo se puede ejercer plenamente cuando se comprende el papel de la mujer al mismo tiempo.
Поскольку танец Танго был создан «мужчинами среди мужчин, чтобы танцевать с женщинами», мы оказываемся в особой ситуации, развитие которой влияет на весь этот танец.
Когда мужчины создавали танго между собой, они попеременно меняли мужские и женские роли с целью, среди прочего, гарантировать, что женщины, с которыми они в конечном итоге будут танцевать и которые не посещают эти практики, смогут их понять и следовать им.
Они создавали шаги и искали лучший способ «обозначить» или «направить» женщину в хореографических сложностях или простотах.
Настолько, что мужчины/звезды танца танго нередко устраивали шоу со своим партнером-мужчиной, а не с партнершей-женщиной.
Таков случай с Маestro Petróleo с Arena, его партнером по практике, о котором вы можете, например, прочитать на этом сайте по адресу Интервью с мaestro Petróleo
(Личный анекдот на эту тему. Однажды я спросил своего маэстро Лампазо, кто, по его мнению, является лучшей танцовщицей (имеется в виду женщина-танцовщица), которую он когда-либо видел. Не дрогнув и без малейшего колебания он сказал: – Арена. – Песок? – Ничего не напоминает. Хорошо, я оставил его там.
Tiempo después en una de esas inolvidables charlas de café sale esa anécdota de aquéllos ases del Tango que daban exhibiciones con sus compañeros de práctica, de lo bueno realmente que había que ser para atreverse a una exhibición, improvisada, como siempre, y lo formidables que eran Petróleo con… Arena (?)… Ahí me cayó la ficha !
¿Cómo? ¿Arena era uno de esos tipos que trabajaban juntos en las prácticas ?
-Claro, ¿no lo sabías ? – Bueno, no. ¿ Y en tanto tiempo Lampazo nunca me lo aclaró ? Qué personajes…)
Entendiendo la trascendencia del hecho de que el Tango es una danza de improvisación, no coreográfica, se entiende la necesidad de que el hombre tenga una absoluta seguridad a la hora de intentar guiar a las damas.
No es raro que muchas veces ellas se quejen de que «no entienden qué trata de hacer el hombre», y ello basta para que los descarten en cuanto tengan la oportunidad.
Repetiré lo que me decía mi madrina-mentora- Carmencita Calderón, que fué pareja de baile del muy legendario José Ovidio Bianchet «El Cachafaz»: «Él le hacía hacer a la mujer lo que él quería » Y sin embargo ellas no tenían en ningún momento la sensación de que él no fuera claro pero suave, no impositivo pero eficaz y seguro, caballeresco y repetuoso, virtuoso sin dejar de ser elegante y firme. En suma, se desvivían por bailar con él.
En una Milonga, lugar de desenvolvimiento del Tango como baile social, la música está generalmente organizada en «tandas» o grupos de temas, ( 4 ó 5 tangos, una cortina separadora de un minuto más o menos, tres Milongas, otros tangos, cortina, tres valses, y así ).
De esa manera las parejas tienen la oportunidad de sondearse uno a otra buscando entenderse y conocerse usando para eso los dos primeros tangos de la tanda y los otros dos o tres para desarrollar su baile ya conociendo algo uno de otro en cuanto a sus fortalezas y posibles debilidades.
Así, el hombre no le pedirá a la dama nada que él mismo intuya que la misma aún no domina. Y ella sabrá cómo formar con él la mejor pareja posible sobre bases realistas.
De lo contrario la dama podría sentirse expuesta a situaciones ingratas ante la observación pública como perder su eje, mostrarse desvalida, y un largo etcétera.
Cuando el hombre falta a esas reglas elementales y sutiles portándose prepotentemente como si lo único importante fuera él, puede ser sancionado con alguna advertencia de los organizadores o aún peor, expulsado.
Hay Milongas muy concurridas, y también se entiende que al comienzo y al final de las mismas puede haber menos público pero en la mitad en general no, de modo que el hombre se encontrará a menudo ante la responsabilidad de guiar a su pareja bajo la presión del contexto:
a) dentro de la cadencia de la música, b) rodeado de otras parejas en cambios de movimiento constantes, c) teniendo que saber su propio rol, d) guiándola cuidadosamente dentro de la cadencia y atento a los imprevistos, e) expresando su propio estilo, siendo él mismo.
Por eso, el Milonguero y la Milonguera se hacen bailando, bailando y bailando.
Cada uno de nosotros tiene sus propias experiencias con esa realidad. Desde que yo empecé a aprender con mi tío Héctor, hermano menor de mamá y Maestro del Club Atlético Independiente (era el año 1952 ) practicaba y aprendía más que nada con él y sus amigos, hasta más o menos los 16 años que empecé a ir a las Milongas.
Para mí era normal que el otro colega con el que practicaba tuviera un baile a veces provocador o desafiante, en general fuerte, y ellos no eran lo que se podría llamar «followers» ( seguidores ).
Cuando me encontré en la realidad de las Milongas con todas esas mujeres que no tenían nada que ver con las tangueras miembros de mi familia me encontré con que la mitad del encanto del baile desaparecia, no por su culpa…
Eran sólo followers ! Lo esperaban todo de mí ! Mis colegas hombres en las prácticas no esperaban todo de mí, ni nada, es más, me ponían frecuentemente en aprietos para poder resolver. Porque eso era Tango, ni más ni menos.
(SIN EMBARGO, DEBO ACLARAR, ESTE TRABAJO ENTRE HOMBRES ERA ABSOLUTAMENTE COLABORATIVO)
Muy mal, en mi opinión…El Tango estaba ahora un poco…como muerto. Le faltaba la mitad…
LA MILONGA, QUE ES SABIA, NOS DIRÁ QUÉ ESTÁ BIEN O MAL.
Al Tango creado por hombres en grupos de a dos, ahora le faltaba uno !
Así que cuando la vida me llevó a encontrarme dando clases me dispuse a instruir y animar a las bailarinas a que trataran de sorprenderme, desafiarme y a que tuvieran iniciativas interesantes e inspiradas, sin temor. Sólo tienen que tener buena técnica. Lo que hay que saber hay que saberlo, porque tiene que haber orden y prioridades claras.
¿Yo quería que tuvieran también un algo…masculino agregado a su femineidad ? Pues… sí. ¿Qué pasa ? ¿ Se van a hacer machos ? PARA NADA.
Van a sacar afuera más creatividad, para nosotros será menos «confortable» porque no podremos dormirnos, pero para eso estamos y para eso somos los hombres en el Tango.
Cuidado, eso no es ninguna ley, es sólo mi opinión.
Y les digo más: a ellas LES ENCANTA. Nos ven más hombres que nunca. Cuando te hacen un adornito-fantasía, o se toman una pequeña iniciativa y usted se lo devuelve con clase y humor ellas tocan el Cielo con las manos. Nunca se aburrirán, y nosotros menos.
Cuántas veces me dicen «sólo le hice un adornito a aquél tipo y me dijo que le estaba alterando el baile !»
O: «Me para en el medio de la pista para darme lecciones y encima me pasa una tarjeta !»
¿ Ustedes creen que nunca las mujeres cuando están bailando piensan que si ellas estuvieran en el lugar del tipo en ese momento y pasaje de la música ellas no harían otra cosa, otro paso, otro efecto ? Les puedo asegurar que sí.
Poco a poco volvía a encontrarme como en casa.
No sé si en sus países lo han notado, pero hay muchas mujeres que, de alguna manera frustradas, buscan aprender el rol del hombre y bailan entre ellas, y son muy capaces de reconocer la magnificencia extraordinaria de esta música, danza y cultura.
No es la única razón por la que pueden frustrarse. Otra no menor es el hecho de que no les gusta estar toda la noche sentadas sólo mirando, con su hermosa ropa y sus costosos zapatitos, impecablemente aseadas y perfumadas y llenas de ilusiones a toda edad. Ya vamos viendo por dónde va el rol del hombre también.
En nuestras Milongas NUNCA dejamos a las mujeres sin bailar.
Entonces: el hombre tiene que capacitarse en el arte y técnica de guiar a la mujer con seguridad, suavidad y certeza PERO SIN NUNCA SUBALTERNIZARLA.
Lo leemos otra vez ? : SIN NUNCA SUBALTERNIZARLA.
No existe Tango argentino en el que no se requiera y domine la marcación elemental. La mujer no tiene por qué ser adivina y nosotros recriminarle internamente que no lo sea.
«Cómo se les ocurre no adivinar lo que ni nosotros tenemos claro ?»
He oído a alguien decir que algún «maestro» dijo que la marca «no existe», bueno, ése es un mero farsante, infiltrado advenedizo, así de simple.
El hombre además no está para lucirse a costa de la mujer haciendo ciertas figuras si no se está seguro que ella las puede entender, seguir y disfrutar. Debe cuidarla en la pista para que no la atropellen. Para que no pierda la entrega a su emoción. Debe bailar en el compás de la música respetando la dirección del baile y también a las demás parejas.
Respecto de la mujer nuestra meta es que ella reciba EMOCIONES. Y en ningún lado dice que la manera de lograrlo tiene que ser erudita y complicada, o aparatosa y menos aún ridícula.
El baile de Tango es un idioma no hablado pero elocuente y los dos deben conocer el vocabulario. Aquí no hay milagros ni efecto sin causa.
Por eso muchos hombres que bailan maravillosamente con sus parejas de toda la vida no lucen igual con una pareja nueva.
El hombre que no ama realmente el Tango tampoco lo escucha lo suficiente, desconoce la música y por ende no puede bailarlo a compás, seguir el ritmo y construir una expresión emocional completa. Eso vale también para las damas.
Para colmo, eso de que hay que bailar siguiendo la melodía de la orquesta o la del cantor es un «mito» ( perdón por abaratar la palabra ) del que hay bastante que hablar porque no es posible en todos los casos, pero sobre todo sí que es indispensable haber oído mucho para que se nos revelen ciertos secretos o desarrollemos cierta síntesis emocional de lo que nos brinda la orquesta/cantor plena que será lo que expresaremos finalmente con nuestro baile, que es INTERPRETACIÓN.
Y madurará y madurará con los años atentos y nunca será bailado de la misma manera.
Esa música y esas experiencias nos habrán transformado, y nos convertiremos en Tango, y ellas, prodigiosas criaturas sin edad, con nosotros; excelso Milagro de a dos.
Muy queridos hermanos Hombres, distinguidos colegas tangonautas, nuestra tarea no es fácil, pero somos tan excepcionales que lo podemos todo, y aquí estamos para ayudarnos. La meta es tan fabulosa… volvemos a casa envueltos en mil perfumes, recordando voces y risas de jardín, que vale todo el esfuerzo posible, y sin embargo… ES FACIL !
Vamos paso a paso, en poco tiempo tendrán incorporado todo lo que necesitan saber.
USTEDES TIENEN EL AS, Y NO PUEDEN FALLAR.